Se anuncia que el presidente en funciones llegará mañana a nuestra ciudad; se trata en principio de una visita cómoda para él, sin problemas, para salir en los medios exultante ante un público boquiabierto que le hará los coros, sin increpaciones porque somos una ciudad históricamente educada aunque se nos haya ninguneado sin escrúpulo alguno; hará el discurso que ya conocemos con imprecaciones a sus adversarios, y creyéndose uno más en el olimpo de los dioses porque sabe que nadie le llevará la contraria; sin embargo me gustaría estar presente y tener la oportunidad de hacerle llegar esta carta (ya que dudo que quisiera responder a tantas cuestiones como me estallan en la cabeza) en un tiempo tan medido y estudiado como, a buen seguro, llevará en su agenda.

Plantearía, como hacían nuestros agricultores, separando el grano de la paja, esquemáticas cuestiones a las que exigiría una comprometida respuesta, tales como:

- Exigir un compromiso serio y efectivo para que esta provincia figure en el mapa gubernamental de la despoblación en España.

- Solicitar un estudio formal de industrialización para la provincia.

- Comprometerse en que se distinga a Zamora como Patrimonio de la Humanidad reconocida por la UNESCO, lucha que se está llevando a cabo desde la Junta de Castilla y León y otras instituciones públicas desde hace años sin resultado efectivo hasta el momento.

- Contratación de personal sanitario para evitar la carencia de facultativos en las zonas rurales e incluso en la propia capital.

- Favorecer y facilitar el aislamiento de la población rural envejecida mediante políticas de integración y aplicando la ley de dependencia.

- Preservar las tradiciones rurales para que no se pierdan en el olvido hábitos, usanzas y un medio de vida que forma parte de nuestra historia, y que constituyeron la base para las posteriores generaciones.

- Exteriorizar el malestar que existe entre los zamoranos porque no hemos tenido apoyo desde el gobierno, excepto si nuestro voto era útil y servía para colocar en la Moncloa al presidente de turno.

Señor Presidente –en funciones- son muchos los requerimientos que necesita nuestra provincia e incontables sus necesidades, no pedimos nada superfluo sino vital para que esta hermosa tierra siga viviendo con dignidad. Somos una comarca pobre, relegada e incluso olvidada de manera recurrente por las administraciones y gobiernos de turno desde hace años; por eso hoy aprovechando su visita consideramos que es una ocasión perfecta para exigirle su implicación formal desde el gobierno sobre algunos de los temas expuestos, porque sentimos la necesidad de hacernos oír y proteger una hermosa provincia olvidada. No nos conformaremos con más migajas, vamos a exigir porque es la única forma de que sepan de nuestra existencia.