IGLESIA DE SAN ISIDORO: siglos XII, XVI, XVIII
Erigida hacia 1178, se encuentra dentro del primer recinto amurallado de la ciudad, muy cerca de la Catedral y del Portillo de la Traición. Su fundación se atribuye a doña Sancha, hermana del emperador don Alfonso quien promovió el traslado de los restos de San Isidoro desde Sevilla a León. En Zamora se conoce popularmente esta iglesia como el Carmen del Castillo o de San Isidoro, ya que en ella está domiciliada la Cofradía de ese nombre.
Iglesia de una sola nave, con capilla mayor de planta cuadrada. En el exterior, llaman la atención dos portadas que se caracterizan por sus arcos concéntricos y la decoración de jambas lisas sin artificios. Embutido sobre la puerta aparece un busto antropomorfo que podría representar a un ángel. Sobre la portada se abren sendas ventanas, una de aspillera sencilla y otra de medio punto flanqueada por columnas.
En el exterior, la iglesia se refuerza con contrafuertes rectangulares. Presenta igualmente cornisas de nacela sobre modillones semejantes a los de la Catedral, y ventanales abocinados en la cabecera. En los tramos extremos de la nave los vanos aparecen remozados por obra acometida durante el siglo XVIII. A este último periodo se corresponden igualmente la espadaña y el característico camarín adosado al testero, una solución arquitectónica corriente en la provincia de Zamora.
En el interior de la iglesia, pese a las reformas ulteriores, se conserva lo principal de la obra original. En el caso del arco triunfal apuntado y del hastial con su rosetón de sencilla tracería.
En 1983 se inició el correspondiente expediente de declaración de Bien de Interés Cultural para este templo.
Iglesia de una sola nave, con capilla mayor de planta cuadrada. En el exterior, llaman la atención dos portadas que se caracterizan por sus arcos concéntricos y la decoración de jambas lisas sin artificios. Embutido sobre la puerta aparece un busto antropomorfo que podría representar a un ángel. Sobre la portada se abren sendas ventanas, una de aspillera sencilla y otra de medio punto flanqueada por columnas.
En el exterior, la iglesia se refuerza con contrafuertes rectangulares. Presenta igualmente cornisas de nacela sobre modillones semejantes a los de la Catedral, y ventanales abocinados en la cabecera. En los tramos extremos de la nave los vanos aparecen remozados por obra acometida durante el siglo XVIII. A este último periodo se corresponden igualmente la espadaña y el característico camarín adosado al testero, una solución arquitectónica corriente en la provincia de Zamora.
En el interior de la iglesia, pese a las reformas ulteriores, se conserva lo principal de la obra original. En el caso del arco triunfal apuntado y del hastial con su rosetón de sencilla tracería.
En 1983 se inició el correspondiente expediente de declaración de Bien de Interés Cultural para este templo.