Poesías de la Tierra del Pan


TIERRA PODEROSA


La sangre tira como tira la tierra,
pesa hacia abajo, entre las raíces
de los sentimientos añejos y nuevos.
Me voy y me llevo tu esencia conmigo
y según me alejo los ojos se empapan
de estos secanos y aquellos barbechos
sin poder mirarlos porque ya mis ojos
están desbordantes de aflicción y llanto.
De nuevo me alejo de estas tierras tristes
a las que amo con dolor tan hondo
que me arranca el alma y fluye el desaliento,
porque aquí las dejo mientras huyo de ellas
por mor de la vida que me las aleja.
Sé que volveré, un día u otro,
cuando la vista se nuble y el cuerpo vencido
por las oleadas de una vida intensa
anhele el reposo que me otorga el pueblo;
un villorrio antiguo, perdido y denostado
por los que allí quedan. Para mí es el cielo
con el que sueño entre los hilvanes
de tareas miles y costuras maltrechas.
Volveré seguro a aquella mi tierra
para formar parte del ciclo del mundo,
y sentirme en casa después de una ausencia
que estiró la vida hasta ser eterna.
Regresaré a la vida después de otra vida
para reposar entre aquellos agros
que acunaron mi infancia y mecerán mi sueño.

Mª Soledad Martín Turiño