MI GENTE

Lucho sin cesar por estas gentes
que aún habitan los pueblos olvidados,
con mi pluma por adarga me bato en duelo
porque ante nadie mi voluntad se agacha.

Vierto palabras donde solo hay silencio,
llamo insistente a puertas cerradas,
hablo con altos cargos y gente de a pie,
recabo datos, proyecto, planifico
y doy en bandeja a otros mis asuntos,
porque quiero a esta gente que es mi gente
y porque nadie es adalid de sus querencias.

Son castellanos viejos, nada piden,
ni siquiera reclaman sus derechos,
laboran con esfuerzo, viven parcos,
y porque no se rebelan, los ignoran.

Gentes de mi tierra zamorana
que aún habitáis en los pueblos vacíos,
resistiendo los rigores del olvido,
amando esa tierra que antaño dio vida
a muchos que ahora la relegan y olvidan,
sois mi gente y como a mi gente quiero.

Mª Soledad Martín Turiño