DEL ESPLENDOR IMPOSIBLE

... donde vida, luz y poder sean himno y florezcan ¿ tendrá fin la antífona del alma, su vibrar, su voz...?
[porque previamente entrará en sus cárcavas y sanará, doblegará la sed del deseo,
y lentamente, abriéndose al cielo y en estricto silencio, concentrará, desplegará sus fuerzas y observará]
... y es entonces cuando, desde el centro del pecho y del mundo, las potencias que emanan prenden y arden,
cuando centellean las letras y brillan sílabas, gritan los acentos y fulgen las palabras,
y, en su haz de esplendores, las vocales son cumbres de oro;
... ay, ay por tanto, esta humilde labor o ser poético mío, este magma oscuro o denso río de piedras,
este exiguo sentir, oír y mirar sin opción a inhalar un tiemblo de los textos sublimes,
ese canto sin más abolido del estruendo o bullir que es mi boca;
ay, ay aquel gozo de inefables léxicos e increada virtud, ay,
y no este hierro que hiende y ahonda en mis brasas sobre un lapsus de nieve;
y ay, ay por fin, esta utopía errante con que lustramos aún esta estancia nuestra, nostálgica y carnal,
este velo de hombres,
este alud o sueño,
esta ingente espera,
este insigne dolor.

Orion de Panthoseas